No sé cómo solucionar el tema de los incentivos de desempeño, esto se ha convertido en un caos, está generando desigualdad en la plantilla, y lejos de ser un incentivo, se está convirtiendo en un problema y un derecho adquirido, ¿qué pensáis vosotros? - decía el gerente al equipo de jefes de venta. Yo quitaría a todos los incentivos, yo lo dejaría como está, sino se va generar un conflicto, yo creo que debemos revisar la política de incentivos - opinaban los segundos.
Situaciones como ésta, o similares, suceden habitualmente en el día a día de una empresa y multitud de profesionales se enfrentan a situaciones de caos e incertidumbre, alrededor de temas diversos que suponen un conflicto de ideas, de posicionamientos y que se pueden atender y decidir desde múltiples enfoques. ¿Dónde está la clave para generar soluciones productivas?
Las últimas tendencias de coaching, management y neuroliderazgo nos están revelando nuevas fórmulas de gestión basadas en los principios sistémicos, donde uno de los principales protagonistas a la hora de abordar cuestiones conflictivas, no se centra en una o varias personas, para decidir una u otra solución,si no que se basan en la inteligencia del sistema.
Trabajar desde éste enfoque y esa mirada nos permite generar organizaciones responsables y comprometidas, basadas en un estilo de gestión de desarrollo y enfocadas a la acción, donde el propósito y la visión es compartida por sus miembros y donde las situaciones de conflicto se gestionan desde un lugar de normalización ante el cambio, consiguiendo ventajas competitivas para la organización y sus miembros.
Manejar y dominar estas claves sistémicas y aprender nuevas habilidades para que afloren las soluciones más productivas son las nuevas palancas que optimizan la gestión de un equipo excelente.
Comentarios (1)